Lilia Luciano se pasa todos los días entrevistando artistas. Esta vez le tocó un nuevo reto, tener frente a frente a su mamá: "la única, la auténtica, la original, Lilia Luciano" a quien, dicho sea de paso, puso en aprietos con preguntas insistentes y sorprendentemente logró sacarle uno que otro secreto del que nunca antes se había enterado.
"Es el amor de mi vida"
-¿Cómo fue que te enteraste de que estabas embarazada de mi? O cómo le diste la noticia a mi papá.
Nos acabábamos de mudar aquí a Miami, aún no habían llegado ni los muebles de Nueva York y recién llegados te concebimos. Yo misma sabía y me lo callé. Como a las cinco semanas me sentía mal y ahí le dije a tu papá: 'yo creo que estoy embarazada'.
-Pero me estaban buscando o fue un ooops!
No, te estábamos buscando. Ya Miguel (tu hermano) tenía cuatro añitos y pico.
-Siempre quise saber por qué quisiste que yo naciera en Puerto Rico.
Con los dos fue lo mismo. Porque tu papá es de ahí y yo también. Yo siempre quise que nacieran en Puerto Rico, para que siempre dijeran que eres puertorriqueña.
-Cuando eras chiquita, ¿qué querías ser de grande?
El otro día justo estaba leyendo un libro que nos firmábamos cuando estábamos en cuarto año de High School y ahí un compañero me escribió: espero verte por los pasillos de un canal de televisión, dirigiendo o produciendo programas de televisión y nunca se me dio.
¡Pero eso nunca me lo dijiste!
-¿Por qué siempre proteges más a mi hermano que a mí?
Yo creo que tú eres más independiente, más decidida (él me va a matar), y él no sé que si como lo tuve más jovencita y lo crié en una ciudad como Nueva York, una ciudad muy fría y me aferré a él.
-Eso explica por qué él es tu favorito...
No. Yo creo que no hay madre que tenga un favorito. A todos los hijos se quiere igual. Eso es algo que tú siempre has creído, pero no.
-¿Cómo me visualizabas que yo iba a ser de grande?
Así tal y lo que eres. Voy a contar una anécdota. Desde los dos años, Lilia se maquillaba, se pintaba las uñas, posaba frente al espejo, ¡con dos años!
"Es el amor de mi vida"
-¿Cómo fue que te enteraste de que estabas embarazada de mi? O cómo le diste la noticia a mi papá.
Nos acabábamos de mudar aquí a Miami, aún no habían llegado ni los muebles de Nueva York y recién llegados te concebimos. Yo misma sabía y me lo callé. Como a las cinco semanas me sentía mal y ahí le dije a tu papá: 'yo creo que estoy embarazada'.
-Pero me estaban buscando o fue un ooops!
No, te estábamos buscando. Ya Miguel (tu hermano) tenía cuatro añitos y pico.
-Siempre quise saber por qué quisiste que yo naciera en Puerto Rico.
Con los dos fue lo mismo. Porque tu papá es de ahí y yo también. Yo siempre quise que nacieran en Puerto Rico, para que siempre dijeran que eres puertorriqueña.
-Cuando eras chiquita, ¿qué querías ser de grande?
El otro día justo estaba leyendo un libro que nos firmábamos cuando estábamos en cuarto año de High School y ahí un compañero me escribió: espero verte por los pasillos de un canal de televisión, dirigiendo o produciendo programas de televisión y nunca se me dio.
¡Pero eso nunca me lo dijiste!
-¿Por qué siempre proteges más a mi hermano que a mí?
Yo creo que tú eres más independiente, más decidida (él me va a matar), y él no sé que si como lo tuve más jovencita y lo crié en una ciudad como Nueva York, una ciudad muy fría y me aferré a él.
-Eso explica por qué él es tu favorito...
No. Yo creo que no hay madre que tenga un favorito. A todos los hijos se quiere igual. Eso es algo que tú siempre has creído, pero no.
-¿Cómo me visualizabas que yo iba a ser de grande?
Así tal y lo que eres. Voy a contar una anécdota. Desde los dos años, Lilia se maquillaba, se pintaba las uñas, posaba frente al espejo, ¡con dos años!
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